Ya te comenté hace un par de semanas que la empresa española PLD Space había conseguido poner su primer cohete en una trayectoria suborbital. Fue un éxito de una empresa 100% española y suponía un primer paso para fabricar un ingenio espacial que permita poner en el espacio satélites comerciales de entre quinientos kilos y una tonelada.
Ayer los tres magníficos de de la empresa alicantina, Raúl Verdú, Ezequiel Sánchez y Raúl Torres, dieron una rueda de prensa en la que contaron su visión del lanzamiento y desglosaron los planes de la compañía para los próximos años, cuyo punto culminante será el lanzamiento del Miura V, que ya es un modelo comercial con el que piensan abrirse hueco en el difícil mercado del lanzamiento de satélites.
Sobre el lanzamiento del Miura I, en la empresa están súper contentísimos y aunque lamentan que, seguramente por la rotura y posterior inundación de uno o dos depósitos de combustible, el lanzador se hundió en el Océano Atlántico y no ha podido ser recuperado. En cualquier caso son conscientes de que lo normal es no recuperar el cohete y ahora mismo a nivel mundial solo Space X, la empresa espacial de Elon Musk, es capaz de recuperar sus lanzadores a base de una tecnología que ha costado miles de millones de dólares desarrollar. No obstante, al tratarse de un lanzador experimental, el Miura I estaba lleno de sensores destinados a adquirir toneladas de parámetros que ahora se están utilizando para perfeccionar el diseño del Miura V.
El análisis del vuelo revela que en un momento dado se tomó la decisión de rebajar la altura que se iba a alcanzar de ochenta a cincuenta km por cuestiones de seguridad, pero esto también es un éxito en sí porque el cohete respondió perfectamente y siguió al milímetro las instrucciones lanzadas desde el centro de control en la base de El Arenosillo que el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial tiene en Huelva. Como curiosidad, también han revelado que en el primer lanzamiento se mandaron al espacio fotos del equipo y sus familias, junto con dos parches de la bandera de España y un queso de la marca Ahuyentalobos, casi rozando lo cañí; son cosas de la edad.
Una vez que el cohete inició el descenso todo salió a pedir de boca y la trayectoria fue estable, los paracaídas de frenado se abrieron correctamente según lo previsto y el amerizaje fue en el punto exacto que se había calculado. Sin embargo es posible que el impacto fuese lateral y dañase uno de los dos tanques principales del cohete que al llenarse de agua lo arrastró a las profundidades. No estaba previsto un equipo de rescate para este caso ya que el Océano Atlántico alcanza rápidamente una considerable profundidad no muy lejos de la costa española.
Con todo lo aprendido en PLD Space están muy seguros de que ahora tienen un montón de información que les va a permitir mejorar el Miura V porque ahora tienen datos que les confirman que todo lo que debía funcionar ha funcionado como ellos esperaban y ahora en vez de con simulaciones o hipótesis, ya pueden trabajar con datos de vuelo. Las pruebas del cohete empezarán a finales de este año en el centro de producción de Teruel y seguramente podremos ir viendo cada paso que vayan dando hasta el primer lanzamiento que está previsto, sin mucha exactitud, a principios de dos mil veinticinco. Desarrollar un cohete espacial no es cosa que se pueda organizar de manera sencilla y en la que se puedan planificar las fechas y los resultados exactos.
Como este es un tema que a mí me interesa muchísimo (y si tú has llegado leyendo hasta aquí, es que a ti también te interesa) en cuanto haya noticias de PLD Space y del Miura V yo las traeré de nuevo hasta aquí. Me fascina que esta gente haya conseguido montar una empresa aeroespacial partiendo absolutamente de cero ¡en España!
Venga, me uno a la fiesta.
Yo propongo que el Ministerio de Igualdad obligue a PLD Space a que en cada misión tripulada viaje en la nave una comisión paritaria de 12 miembros que controle que el resto de la tripulación sea inclusiva y haya al menos un representante de cada uno de los géneros, etnias, razas y religiones del planeta. Para hacer obligatorio el cumplimiento de esta norma a la compañía se le impondrá una multa de un millón de euros por cada uno de los perfiles que falten en la misión así que, ya saben, si en su primer vuelo tripulado solo tienen una plaza para un astronauta les caerá una multa de alrededor de 1.300 millones de euros. Y no se me asusten porque según la lógica progre, si una empresa no es capaz de pagar sus multas, que eche el cierre.
Vale, te acepto la apuesta.
Yo propongo que PLD Space tenga que hacer sus naves espaciales con forma de genitales femeninos para evitar el simbolismo fálico heteropatrialcal del cohete tradicional, así España sería el primer país del mundo en lanzar un coñete espacial. 😀
El problema que tienen es que si les sale mal, les van a acusar de ser una mala empresa y de no poder pagar salarios dignos a sus trabajadores y les obligarán a cerrar y si les sale bien les dirán que se han convertido en los ricos y entonces les pondrán impuestos abusivos, les obligarán a contratar mujeres aunque no tengan ni idea de astronáutica y a crear un observatorio para la igualdad en el espacio estelar y les acabarán j******* la empresa.
No sé ni cómo se les ocurre montar una empresa así en España.
Malos tiempos para la física, como diría Golpes Bajos.