Mira qué curioso: el sitio web Visual Capitalist ha publicado una infografía donde recoge los que según ellos son los 15 teléfonos más vendidos de la historia.
Aunque ahora mismo te pille un poco a contrapié, si ya tienes cierta edad
caerás rápidamente en la cuenta de que los teléfonos más vendidos han tenido que ser a la fuerza los Nokia porque hubo un momento en el que todo el mundo tenía un Nokia, por mucho que Apple haya vendido muchos cantidades ingentes de teléfonos. Las ventas de los teléfonos de Apple no pueden llegar jamás a compararse con las de Nokia porque perderían la exclusividad en la que basan su marketing. De todas maneras los iPhones se han vendido en cantidades inmensas alrededor de todo el planeta.
Otro dato curioso que se puede ver en esta relación de los quince teléfonos más vendidos de la historia es que no hay ni un solo modelo con Android. O son teléfonos de Nokia o son teléfonos con iOS y no hay más que hablar. La famosa fragmentación del ecosistema Android se refleja perfectamente en esta infografía porque si se sumarse en las ventas actuales de los teléfonos Android palidecerían los datos de venta que se recogen para Nokia o Apple pero al haber tantas marcas produciendo tantísimos teléfonos distintos con Android instalado, uno por uno no se acercan ni remotamente a las cantidades de teléfonos que ves aquí.
Para hacerte una idea, la exitosa serie S23 de Samsung que ha sido su modelo estrella durante el año pasado y que se ha consolidado como el teléfono Android más vendido por sus fabulosas prestaciones (aunque soportadas por un altísimo precio) no ha llegado ni a los cuarenta millones de ejemplares vendidos en todo el mundo y ya está en las estanterías el S24 que le sucederá.
Viendo este gráfico, también puedes abandonarte a la nostalgia y pensar en aquellos años cuando tú llevabas un Nokia en el bolsillo y disfrutabas por lo pequeñito y lo portable que era o puedes entretenerte también en hacer una reflexión sobre cómo cambian las cosas y como una empresa que estaba tocando el cielo cometió gravísimos errores estratégicos empeñándose en sostener su sistema operativo Symbian y acabó por liquidar su división de teléfonos móviles a precio de saldo.
