Ver a Pedro Sánchez reunirse con el rey Mohamed en estos días y prometer ayudas para la agricultura marroquí es algo que ha hecho saltar muchos interrogantes sobre cuál es la relación de Pedro Sánchez con Marruecos.
Cualquier persona que siga la actualidad española, a no ser que seas un socialista que se cree a pies juntillas todo lo que le llega desde Ferraz, verá que no se podía haber hecho la visita a Marruecos en peor momento, con los agricultores asaltando ciudades con sus tractores y con los cuerpos de los guardias civiles recién enterrados tras su asesinato por narcos del estrecho.
Al ver a Pedro Sánchez en ese viaje es inevitable preguntarse qué le debe Pedro Sánchez a Marruecos porque una foto con Mohamed VI en estos días, después de regalarle dinero para una desaladora y asegurarle ayudas con dinero público español de hasta cuarenta y cinco mil millones de euros, tiene un coste político enorme. Por supuesto que eso no le va a salir gratis y él lo sabe y si ha decidido asumir ese lastre es porque tiene que haber un contrapeso positivo en la balanza que yo no conozco y no encuentro a nadie que sea capaz de explicarme cuál es.
Ahora voy a proponer varias hipótesis, basadas sólo en impresiones personales sobre cuáles podrían ser las razones que impulsan a Pedro Sánchez a mantener testarudamente esa postura favorable a Marruecos aún cuando sea totalmente contraria a los intereses españoles. Por supuesto, no tengo ni la más mínima prueba de que esto que voy a decir a continuación sea verdad y ni siquiera puedo saber si se cumple alguna de estas hipótesis pero tengo que planteármelas porque el servilismo del PS, el partido de Pedro Sánchez antes conocido como PSOE, con Marruecos está fuera de todo lo que yo puedo entender. Ten en cuenta que aunque las he enumerado, no pongo ninguna por delante de la otra ni creo que una sea más posible que la otra, con Sánchez todo es posible.
Hipótesis uno: Pegasus
Es posible que los servicios secretos marroquíes llevasen ya mucho tiempo dentro de los teléfonos de todos los que ahora son el núcleo de poder de Partido Socialista y conozcan un montón de trapos sucios de todos ellos, empezando por Pedro Sánchez. Me imagino que cuando estaban intentando tomar el PSOE al asalto, igual pudieron planear estratagemas bastante sucias o manejar una información turbia sobre otros candidatos dentro del PSOE y ahora toda ese conocimiento le sirve a los marroquíes para poder influir de manera determinante en la posición española respecto a Marruecos bajo la amenaza de revelación de esos secretos. Lo que puedan ser esos trapos sucios está fuera de mi imaginación; no quiero ni pensarlo.
Hipótesis dos: la marioneta
Es posible pensar que Pedro Sánchez sea desde el principio una marioneta de la inteligencia marroquí para alcanzar el poder y que la jugada les haya salido incluso mejor de lo que ellos nunca imaginaron. No sería de extrañar que llevasen bastantes años ya invirtiendo su dinero en apoyar su candidatura, primero para controlar el PSOE y después para llegar al gobierno. Esto puede incluir ayuda económica, pero también se le puede ayudar dándole información sobre lo que hay en los teléfonos de sus rivales o, simplemente, quitándole adversarios de enmedio con procedimientos más o menos deshonestos. Por eso ahora la inteligencia marroquí tiene un montón de información que Pedro Sánchez no quiere que se revele de ninguna manera y hace exactamente lo que conviene al país vecino aunque eso perjudique directamente los intereses de España.
Si piensas que esto es algo descabellado, ten en cuenta que se lleva ya varios años de lucha en toda Europa contra la infiltración del espionaje marroquí en todas las instituciones europeas para conseguir cambiar la posición de la Unión Europea hacia Marruecos que se ha hecho a base de sobornos millonarios en cantidades que a los ciudadanos de a pie nos cuesta imaginar. Marruecos sabe que las decisiones comunitarias sobre el comercio exterior pueden reportarle miles de millones de euros en exportaciones y hace las inversiones correspondientes; en el caso español está claro que su vecino del norte es un objetivo comercial de primer orden pero además aquí intervienen los factores geopolíticos por los conflictos del Sáhara y la reclamación marroquí sobre Ceuta y Melilla.
Hipótesis tres: desequilibrio mental
Cabe también la posibilidad de que Pedro Sánchez haya llegado al convencimiento de que para salir adelante no debe hacer lo que esperan de él sino tomar posiciones alternativas que hasta ahora le han dado buen resultado. Cuando le echaron por primera vez de la secretaría general del PSOE, la mayoría de la gente se hubiese retirado de la organización y hubiese elegido otras vías pero él, contra viento y marea, decidió que lo mejor para él era volver a presentarse y conseguir ser secretario general del PSOE como tal y como hizo. Es posible que ante la percepción de su propio éxito, esté tan absolutamente convencido de que las políticas que a él imagina en su cabeza son absolutamente beneficiosas para España, aunque todo el mundo le diga lo contrario, que insista en mantenerlas y las refuerce en un delirio narcisista totalmente fuera de control.
Hipótesis cuatro: cálculos políticos
Es posible que Pedro Sánchez, simplemente haya recogido el guante de los agricultores y los haya señalado como sus enemigos. Si no me vais a votar nunca, yo os voy a hundir. Cabe la posibilidad de que Pedro Sánchez ponga los intereses personales o los de su partido, su capacidad de ser reelegido, por encima de los intereses de España y advierta así a cualquier sector que intente plantarle cara que no va a escatimar esfuerzos en hundirles si no adulan al gobierno como, por ejemplo, hace el sector del cine. Parece que piensa que al enemigo, ni agua, aunque ese supuesto enemigo sean los españoles y los supuestos amigos, los marroquís. Además, así envía un aviso a navegantes por si algún otro sector de la economía intentase plantarle cara: el que no me ria las gracias, va a la ruina.
Pedro Sánchez ya ha demostrado sobradamente que va a hacer todo lo posible para mantenerse en el poder porque piensa que la política es alcanzar el poder sin miramientos, aunque para eso se tenga que llevar por delante a la agricultura o a todo el que se le enfrente. Es posible que haya hecho cuentas de los votos que gana y de los que pierde con esa actitud ante Marruecos y le compense por el daño que hace a los agricultores, esos «empresarios» que cortan carreteras con sus tractores llevando una bandera de España.
Hipótesis descartadas
Hay quien atribuye el servilismo de Pedro Sánchez con Marruecos al conocimiento de los servicios secretos marroquíes de datos sobre los atentados del 11-M en Madrid que podrían hacer mucho daño al PSOE si salieran a la luz pero, después de ver lo que estamos viendo, dudo mucho que Pedro Sánchez hipotecarse su imagen pública para proteger a Zapatero o a otros políticos que ocupaban cargos importantes cuando se produjo aquel atentado. Pedro Sánchez vendería a su madre para ganar unos votos; la lealtad, desde luego, no es uno de sus principales rasgos.
Otra de las hipótesis que circulan para explicar la humillación constante de Pedro Sánchez y los ministros a sus órdenes frente a Marruecos es que Pedro Sánchez se está beneficiando económicamente del tráfico de drogas en el Estrecho y tiene algún acuerdo económico con los marroquís para llevarse un porcentaje del negocio igual que seguramente hace su contraparte africana. No tengo ninguna duda de que la administración del país norteafricano y los altos cargos de su gobierno están implicados en el tráfico de hachís y se benefician económicamente de esa desgracia pero me resulta difícil de aceptar que la cúpula del PSOE participe en un esquema así porque la pista del dinero es demasiado fácil de seguir y cada poco tiempo salen unos papers que revelan escándalos en paraísos fiscales que hacen inviable que un presidente del Gobierno español pueda entrar en uno de esos esquemas delictivos sin que lo pillen a los dos días.
Resumiendo
Como ya dije antes, no tengo ningún dato que pruebe ninguna de estas hipótesis pero no dejo de darle vueltas al asunto porque algo tiene que haber que explique los disparates que está haciendo contra los intereses de España. Que pactar con nacionalistas y e independentistas va contra los intereses de España, es obvio pero tiene una explicación tan sencilla como pagar los votos que le hacen falta para mantenerse gobernando en La Moncloa pero esto de Marruecos va un paso más allá y no tiene una explicación evidente.
¿Tú crees que estoy en lo cierto, tienes tu propia propias hipótesis o simplemente crees que son decisiones erróneas a muy corto plazo que podría haber tomado cualquier otro político?