Los tartares y carpaccios son una joya de la cocina en crudo, donde los sabores auténticos y las texturas naturales de los ingredientes se convierten en protagonistas. Estas preparaciones, aunque de origen diverso, comparten un principio fundamental: el respeto absoluto por el producto principal, ya sea carne, pescado o incluso vegetales. En un tartar, los ingredientes se presentan finamente picados y aliñados, permitiendo combinaciones que van desde el clásico steak tartare hasta opciones con salmón o atún. Por su parte, el carpaccio muestra el alimento en finísimas láminas que se realzan con aliños sencillos, donde cada sabor queda expuesto de forma pura y directa.
En la cocina mediterránea y la gastronomía global, estos platos han ganado popularidad por su elegancia y ligereza, ideales tanto como entrantes en una comida sofisticada como en un menú diario que busque frescura y calidad. Además, su versatilidad permite personalizarlos según el gusto y la creatividad, integrando desde hierbas frescas y cítricos hasta salsas intensas y toques de especias. Aunque originalmente eran platos basados en carne y pescado, hoy en día se adaptan fácilmente a ingredientes vegetales, ofreciendo versiones vegetarianas o veganas que no dejan de sorprender y satisfacer.
Para quienes disfrutan de la cocina en crudo, preparar un buen tartar o carpaccio es una forma de experimentar sin necesidad de una cocción extensa, permitiendo que los ingredientes hablen por sí mismos. Este apartado del recetario está diseñado para guiarte a través de recetas variadas, explicadas paso a paso, con ingredientes fáciles de encontrar y trucos prácticos para obtener los mejores resultados.
Tartares
Volver al Menú diario
