Como todos los años, esta primera quincena de agosto estoy en Cádiar.
Como siempre, también, me he traído un «pincho» para conectarme a Internet y mantener las páginas activas.
La diferencia este año la he encontrado en que en la Cafetería Servando hay una conexión abierta y gratuita. Bueno… gratuita del todo, tampoco es pero lo que pagas te lo devuelven en forma de café y media tostada así que se trabaja en la gloria. Además, Encarni, la encargada es encantadora y siempre te recibe con una sonrisa en la boca.
Resumiendo: trato agradable, wifi gratis y aire acondicionado ¿qué más se puede pedir?
¡Cómo cambian las cosas! Antes venía uno al pueblo desbocao y se tiraba a la calle para encontrarse con los amigos y ahora viene uno pensando en cómo trabajar agustico.