Assassin’s Creed
El Animus, una pieza central tanto en los juegos como en la película, se utiliza para explorar las memorias genéticas de los ancestros de Callum. Consiste en una máquina que supuestamente recupera recuerdos grabados en el ADN en tiempos pasados y los transmite a las personas en la actualidad, con lo cual cualquiera puede meterse en la piel y vivir las aventuras y conocer los secretos que un antepasado suyo supo hace varios siglos. La representación del Animus en la película es una versión más dinámica y físicamente activa que en los juegos, probablemente para ofrecer un espectáculo visual más atractivo y, posiblemente, para no hacer un aparato demasiado parecido al de las películas de Matrix.