Leer la carta de un restaurante japonés, sobre todo las primeras doscientas veces, es un reto a la honestidad intelectual del comensal. La mayoría de nosotros, la verdad es que optamos por poner cara de saber lo que nos vamos a comer y después intentamos disimular la sorpresa que nos llevamos cuando nos traen los platos porque no teníamos ni idea de qué era eso tan rimbombante qué habíamos pedido.
Sin embargo poco a poco la cocina japonesa va calando y algunos de sus platos ya son increíblemente populares en España, empezando por el ramen, que está en nuestras despensas con la marca Yatekomo y otro montón de marcas y marcas blancas y que es una cena más que habitual en nuestro país.
Sushi: el embajador de la cocina japonesa
El sushi se ha convertido en sinónimo de la cocina japonesa en todo el mundo y España no es la excepción. Esta delicadeza consiste en arroz sazonado con vinagre, combinado con una variedad de ingredientes como pescado, mariscos, vegetales y, a veces, frutas. Existen varias formas de sushi, incluyendo el nigiri (bocados de arroz cubiertos con pescado), el maki (rollos envueltos en algas marinas) y el sashimi (pescado crudo sin arroz), cada uno ofreciendo una experiencia única de sabores y texturas. La popularidad del sushi ha crecido exponencialmente en España, siendo ahora un plato principal en muchos menús de restaurantes no solo japoneses sino también de cocina internacional.
Consejo para los más estudiaos: si no quieres parecer un paleto, no pronuncies el nombre de este plato como el de tu prima Susana, la Susi, y acuérdate de remarcar bien la hache de la segunda sílaba pero sin llegar a pronunciar suchi.
Ramen: confort en un cuenco
El ramen es un plato de sopa de fideos que ha encontrado un lugar especial en el corazón de los españoles. Originario de Japón, este plato consiste en fideos de trigo servidos en un caldo sabroso, típicamente basado en carne o pescado, y se complementa con diversos ingredientes como carne de cerdo, brotes de bambú, huevo cocido, nori y cebollas verdes. La versatilidad del ramen permite una amplia gama de sabores y estilos, desde el ligero y claro Shoyu hasta el rico y cremoso Tonkotsu, convirtiéndolo en un favorito entre aquellos que buscan tanto sabor como sustancia en su comida.
Ver Ramen Ver Receta de shoyu ramen
Tempura: la perfección crujiente
La tempura, otro plato icónico de Japón, ha encontrado fácilmente su lugar en las mesas españolas. Consiste en mariscos y vegetales bañados en una ligera y aireada masa de harina y luego fritos hasta alcanzar un color dorado perfecto. La clave de una buena tempura radica en su textura crujiente, sin ser grasienta, y en la habilidad para resaltar los sabores naturales de sus ingredientes. A menudo servida con una salsa tensuyu para mojar, la tempura ofrece una experiencia culinaria que equilibra el sabor delicado con la satisfacción de un bocado crujiente.
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Yakitori: el arte de la parrilla
El yakitori, brochetas de pollo asadas sobre carbón, es un plato que captura la esencia de la cocina japonesa con su simplicidad y profundidad de sabor. Cada parte del pollo, desde la pechuga hasta la piel, se utiliza en el yakitori, demostrando un profundo respeto por los ingredientes y la minimización del desperdicio. Las brochetas se sazonan típicamente con sal o una salsa a base de soja, conocida como tare, antes de ser asadas a la perfección. Esta combinación de sazón y técnica de cocción produce un plato humilde pero profundamente satisfactorio, muy apreciado en bares y restaurantes españoles.
Mochi: dulzura tradicional
El mochi, un dulce japonés hecho de arroz glutinoso molido y formado en pasteles, ha ganado popularidad en España como un final perfecto para una comida japonesa. Este postre puede estar relleno con una variedad de ingredientes, siendo el anko (pasta de judías rojas dulces) uno de los más tradicionales. Sin embargo, la innovación en sabores como el té verde, fresa y hasta helado ha hecho del mochi una delicia moderna que atrae a un amplio espectro de paladares. La textura única y masticable del mochi, combinada con sus rellenos dulces y a veces sorprendentes, lo convierten en un favorito tanto para los amantes de lo dulce como para aquellos en busca de una experiencia culinaria diferente.
Ver Mochi Ver Receta de mochis de chocolate
Edamame: las tapas a la japonesa
Edamame son vainas de soja tiernas cocidas en agua salada y servidas enteras. Este plato sencillo, pero profundamente alimenticio, es el aperitivo perfecto para empezar una comida japonesa. Consumidas directamente de la vaina, solo se ingieren los granos interiores, dejando la vaina. El edamame es apreciado no solo por su sabor fresco y ligeramente salado, sino también por sus beneficios nutricionales, siendo una excelente fuente de proteínas, fibra y vitaminas. Comúnmente disfrutado con una cerveza fría o como entrada antes de platos más elaborados, el edamame es un ejemplo perfecto de la cocina japonesa, donde la simplicidad y el respeto por el ingrediente destacan en cada bocado.
Ver Edamame, la tapa japonesa
Otros platos no tan conocidos:
- Chawanmushi: un suave y sedoso flan de huevo al vapor, a menudo con mariscos o pollo.
Ver Receta de chawanmushi - Kaki Fry: ostras empanadas y fritas.
- Karaage: pollo empanado con panko
Ver Receta de karaage - Kare Raisu (Curry japonés): un curry espeso y suave servido sobre arroz.
- Korokke: versión japonesa de las croquetas.
Ver Korokke - Nasu Dengaku: berenjenas asadas cubiertas con miso dulce.
Ver Receta de dengaku - Nikujaga: un estofado de carne y patatas, dulce y salado.
Ver Receta de nikujaga - Nikuman: panecillos al vapor rellenos de carne
Ver Receta de nikuman - Onigiri: bolas de arroz rellenas de pescado, umeboshi, o cualquier condimento salado, envueltas en nori.
Ver Receta de onigiri de salmón - Okonomiyaki: una especie de tortilla o pancake salado, cargado de ingredientes a elección.
- Oyakodon: un plato de arroz con pollo, huevo y cebolla, cocido en una salsa dulce de soja.
Ver Receta de oyakodon - Shabu Shabu: fondue japonesa de carne finamente rebanada que se cocina rápidamente en caldo hirviendo.
- Soba: fideos finos de trigo sarraceno, servidos fríos con salsa o en caldo caliente.
- Takoyaki: bolas de masa rellenas de pulpo, un bocado popular en las calles de Osaka.
Ver Receta de Takoyaki - Tamagoyaki: una tortilla japonesa dulce y enrollada.
Ver Receta de tamagoyaki - Tofu Agedashi: tofu frito servido en un caldo dashi caliente.
- Tonkatsu: chuleta de cerdo empanada y frita.
Ver Receta de curry katsu - Tsukemono: vegetales encurtidos, un acompañamiento esencial en la mesa japonesa.
- Udon: fideos gruesos de trigo servidos en un caldo caliente o frío.
- Unagi Don (Unadon): un bol de arroz cubierto con anguila asada en salsa de soja.
Cada uno de estos platos ofrece un vistazo a la diversidad y la riqueza de la cocina japonesa, más allá de los populares sushi y ramen. La exploración de estos platos menos conocidos puede abrir un nuevo mundo de sabores, texturas y experiencias culinarias, invitando a los comensales a profundizar en la tradición y la innovación que define la gastronomía japonesa.
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