Preparación del agar
La clave para trabajar con agar-agar reside en su correcta disolución y gelificación. A diferencia de la gelatina, el agar-agar debe hervirse para activar sus propiedades gelificantes. Para los postres, una proporción típica podría ser de 0.5 a 1 gramo de agar-agar por cada 100 ml de líquido, dependiendo de la firmeza deseada. Es crucial medir con precisión y experimentar para lograr la textura perfecta, ya que el agar-agar gelifica a una temperatura más alta y resulta en una textura diferente a la de la gelatina basada en colágeno.