El Palacio de Diocleciano, situado en el corazón de Split, es una de las construcciones romanas más impresionantes y mejor conservadas del mundo. Construido a finales del siglo III y principios del IV por el emperador romano Diocleciano como su retiro personal, el palacio no es solo una maravilla arquitectónica, sino también un testimonio vivo de la historia romana. Hoy en día, este monumento es una vibrante zona urbana llena de vida, donde la historia y la modernidad coexisten de manera fascinante.
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Historia del Palacio de Diocleciano
El emperador Diocleciano ordenó la construcción de este palacio monumental alrededor del año 295 d.C. después de abdicar como emperador, siendo el único emperador romano en hacerlo voluntariamente. El palacio fue diseñado como una combinación de villa de lujo y fortaleza militar, con altos muros y torres defensivas. A lo largo de los siglos, el palacio ha sido continuamente habitado y adaptado, convirtiéndose en el núcleo del actual casco antiguo de Split.
Estructura y diseño
El Palacio de Diocleciano abarca una superficie de aproximadamente 30,000 metros cuadrados. Su diseño rectangular está dividido en dos secciones principales: la parte sur, que albergaba las residencias imperiales y los edificios de lujo, y la parte norte, utilizada principalmente para los soldados y el personal de servicio.
- Puerta de Oro (Porta Aurea): Una de las cuatro puertas monumentales del palacio, la Puerta de Oro es la entrada principal y más decorativa. Desde aquí, los visitantes pueden empezar su recorrido por el palacio.
- Puerta de Plata (Porta Argentea): Esta puerta, situada en el lado este, lleva directamente a una de las principales calles del palacio, que conduce al Peristilo.
- Puerta de Hierro (Porta Ferrea) y Puerta de Bronce (Porta Aenea): Estas puertas se encuentran en el lado oeste y sur respectivamente, cada una con su propia historia y características únicas.
El Peristilo
El Peristilo es el corazón del palacio, una plaza central rodeada de columnas corintias, donde Diocleciano se presentaba ante sus súbditos. Hoy en día, es uno de los lugares más animados de Split, donde los turistas pueden disfrutar de actuaciones musicales, tomar un café o simplemente admirar la arquitectura antigua.
- Catedral de San Duje: Originalmente el mausoleo de Diocleciano, esta catedral es una de las más antiguas del mundo que sigue en uso. Su campanario ofrece unas vistas impresionantes de la ciudad y el mar.
- Esfinge egipcia: Una auténtica esfinge traída de Egipto por Diocleciano, ubicada cerca del Peristilo, añade un toque exótico al lugar.
El Templo de Júpiter
El Templo de Júpiter, convertido en el Baptisterio de San Juan, es otra joya arquitectónica del palacio. Este templo, dedicado al dios romano Júpiter, presenta una impresionante bóveda y una estatua de San Juan Bautista. La fachada del templo está decorada con relieves intrincados que han sobrevivido siglos de historia.
Subestructuras del palacio
Las subestructuras del Palacio de Diocleciano son una red de pasillos y salas que originalmente sostenían la parte superior del palacio. Estas áreas subterráneas, increíblemente bien conservadas, ofrecen una visión fascinante de la ingeniería romana. Hoy en día, albergan mercados, exposiciones y eventos culturales.
La vida dentro del palacio
Caminar por las calles del Palacio de Diocleciano es como viajar en el tiempo. Las antiguas viviendas romanas han sido transformadas en tiendas, cafeterías y restaurantes. Las plazas y patios están llenos de vida, con artistas callejeros y músicos que añaden un ambiente vibrante.
- Plaza del Pueblo (Pjaca): Situada justo fuera de la puerta occidental del palacio, esta plaza es un punto de encuentro popular, rodeada de edificios históricos, cafeterías y tiendas.
- Mercado de la ciudad: En las cercanías del palacio, este mercado ofrece una variedad de productos frescos, desde frutas y verduras hasta pescados y carnes, proporcionando una experiencia auténtica de la vida local.
Consejos para visitar el palacio
- Horario: El palacio está abierto todo el año, pero es recomendable visitarlo temprano en la mañana o al final de la tarde para evitar las multitudes.
- Entradas: Algunas áreas del palacio, como la Catedral de San Duje y el Templo de Júpiter, requieren entradas. Es posible adquirir un pase combinado para varias atracciones.
- Guías: Considera contratar una visita guiada para obtener una comprensión más profunda de la historia y la arquitectura del palacio.
